La rehabilitación de edificios y barrios en el parque residencial español afronta muchos y variados problemas, que deben afrontarse desde diversos sectores y por parte de los más variados agentes, tanto públicos, como privados.
Desde el punto de vista nacional, se es consciente de que algunos de dichos problemas forman parte de la esfera competencial estatal, porque afectan a derechos constitucionales cuya garantía y umbral de uniformidad corresponden al Estado, porque el subsector de la rehabilitación, dentro del sector de la construcción tiene incidencia en la Economía Nacional, porque la rehabilitación y la regeneración urbana puede y debe tener un efecto positivo en los compromisos internacionales asumidos por España en relación con la eficiencia energética y el cambio climático, y un largo etc.
Desde el año 2013, son muchas las iniciativas que se han puesto en marcha desde el Estado, para afrontar algunos de los problemas que aquejan a lo que debería ser ya una política activa de actuación sobre el medio urbano de los pueblos y ciudades de España. Entre ellas, deben citarse, al menos, las siguientes:
1.- La aprobación de la Ley 8/2013, de 26 de junio, de rehabilitación, regeneración y renovación urbanas, hoy ya integrada en el Texto Refundido de la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana de 30 de octubre de 2015 y dentro de ella, la modificación de la Ley de Propiedad horizontal y de otras normas para facilitar dichos procesos.
2.- La puesta en marcha de un nuevo Plan de Vivienda 2013-2016, cuyo uno de los ejes fundamentales fue la rehabilitación, regeneración y renovación urbanas.
3.- La elaboración y envío a Europa, dentro del plazo establecido, de la “Estrategia a largo plazo para la Rehabilitación Energética en el sector de la edificación en España, en desarrollo del artículo 4 de la Directiva 2012/27/UE”. Esta Estrategia, además, está coordinada con el Plan Nacional de Acción de Eficiencia Energética 2014-2020, enviado a la UE el 30 de abril de 2014.
4.- La colaboración con la FEMP para poner en marcha Ordenanzas-tipo que les permitan aplicar prontamente las novedades legislativas estatales, en el caso de que la adaptación autonómica sea lenta o, finalmente, no llegue.
Indudablemente no están todas las que harían falta, pero todas las que se han adoptado eran precisas. Y el diagnóstico de lo que aún queda por hacer también está hecho, lo que permitirá ir adoptando nuevas medidas de manera gradual, cuando vaya siendo posible.